Tom Holland está en plena promoción de The Crowded Room, serie en la que encarna a Danny Sullivan, un hombre que es detenido por un crimen que no cometió. Para prepararse para la ficción, el actor se ha interesado mucho por la salud mental, hasta el punto de haber dejado de beber para meterse de lleno en el personaje.
"Ser parte de la serie también hizo que Holland, que lleva un año y cuatro meses sobrio, cambiará la forma en que ve su propia salud mental", ha revelado Entertainment Weekly, que también recoge las declaraciones del intérprete. "Aprender sobre la salud mental y el poder que tiene, y hablar con psiquiatras sobre las luchas de Danny y Billy ha sido algo muy informativo para mi propia vida", confesó el actor sobre los personajes.
Además, Holland también aseguró que este papel le ha ayudado a reconocer qué tipo de situaciones le "provocan estrés", como es hacer uso de las redes sociales. "No soy ajeno a los aspectos físicos de este trabajo porque he hecho películas de acción. Pero el aspecto mental, realmente me afectó y me llevó mucho tiempo recuperarme después y volver a la realidad", agregó.
"Viendo The Crowded Room, los espectadores van a tener más respeto y más empatía por las personas que están pasando por problemas de salud mental. Espero que las personas se informen sobre el poder de la salud mental, las luchas que implica y nuestras increíbles habilidades para sobrevivir", señaló.